Todos los aspectos de una plataforma de experiencia digital tradicional (DXP)

Según PwC, el 32% de los clientes dejan de hacer negocios con una marca que les encanta después de experimentar tan solo una mala experiencia. Y teniendo en cuenta la las opciones disponibles para los clientes, esto no resulta sorprendente. En tan solo unos pocos clics, cualquiera puede encontrar tiendas alternativas, leer opiniones y comparar precios. Los clientes tienen toda la información a su alcance y, con más del 50% de todo el tráfico online procediendo de teléfonos móviles (Statista), pueden realizar sus búsquedas en cualquier momento y lugar.

En la actualidad, las empresas deben proporcionar una experiencia de cliente extraordinaria para diferenciarse de la competencia y lograr que los clientes regresen. Esto significa crear unas experiencias inteligentes, personalizadas y bien programadas en las que se presta gran atención a los detalles logrando que el cliente se sienta cuidado durante todo el proceso.

Como el mundo online ha crecido y evolucionado, los clientes pueden interactuar ahora con tu marca a través de múltiples touchpoint digitales tales como redes sociales, anuncios de pago, Amazon, etc. Esto, sumado a eventos tales como la pandemia global, ha acelerado la demanda de experiencias rápidas y fluidas en todos los canales. Por ello, las empresas necesitan soluciones complejas para poder escalar con la rapidez suficiente para satisfacer dichas demandas.

Los consumidores utilizan una media de casi 6 touchpoints, mientras que casi un 50% utilizan normalmente más de 4. Y se espera que el contenido sea coherente en todos y cada uno de ellos.

Cada empresa es diferente y cuenta con estructuras internas, prioridades y recursos distintos. Este es el motivo por el que creemos que todas las empresas deben tener una gama de opciones a su disposición a la hora de buscar una solución que impulse su proceso de personalización.

Las DXP composables están ganando popularidad y serán la solución perfecta para algunas empresas. Sin embargo, todavía queda espacio para una solución tradicional.

Un factor clave a tener en cuenta a la hora de decidir cuál es la DXP adecuada en tu caso, es el tipo de infraestructura de alojamiento actual o preferido y si forma parte de tu estrategia actual. Entre estas opciones se incluyen:

• Tu nube: la solución que normalmente se encuentra en sectores sujetos a reglamentos y políticas de control de datos muy estrictos. Se trata de una solución interna de alojamiento de infraestructura de IT.
• Nuestra nube: esta opción ofrece las mismas funcionalidades que si implementaras tu propia solución de alojamiento, pero decidieras externalizar muchos aspectos cuyo coste es elevado.
• Como servicio: una verdadera solución en la nube, adaptada a tus necesidades empresariales, con actualizaciones continuas y adición de funciones.

Si tu estrategia de infraestructura encaja con la solución "Tu nube" o "Nuestra nube", entonces es probable que una DXP tradicional sea la mejor opción en tu caso.

Elegir una DXP tradicional puede ofrecer las siguientes ventajas para tu experiencia:

DXP centrada:

una DXP tradicional ofrece un único sistema para que los equipos de la web, contenido y marketing ejecuten su estrategia de personalización. Tener una única interfaz significa que los equipos obtienen una visión holística de las experiencias digitales, que pueden gestionar de forma centralizada. Esto hace que las DXP tradicionales sean mucho más accesibles y fáciles de usar.

Los equipos solo tienen que conocer las ventajas e inconvenientes de disponer de una sola plataforma, lo que reduce en gran medida el margen de error. Ya que, por supuesto, estos conllevan pérdidas de tiempo, recursos y dinero.

Más opciones de implementación:

las opciones de alojamiento existentes desempeñarán un papel fundamental a la hora de decidir tu solución DXP. Una DPX tradicional te permite alojar tu propia plataforma de experiencia digital o dar los primeros pasos hacia SaaS aprovechando una experiencia gestionada en la nube. Esto alivia la presión que supone tener que cambiar a SaaS antes de que tu empresa esté preparada y te permite ejecutar tu estrategia de la manera correcta en tu caso.

Control de marketing:

las soluciones DXP tradicionales ofrecen un software muy potente que incorpora herramientas fáciles de usar, lo que te permite tener el control de las experiencias que ofreces. También podrás aprovechar las ventajas que ofrece disponer de un punto central de recopilación de datos. Esto agiliza y facilita la recopilación, análisis y aprovechamiento de los datos, permitiéndote reaccionar y sacar partido a la información en tiempo real.

Seguridad:

una DXP tradicional significa que tus medidas de seguridad funcionarán de forma coherente en todas partes. No existe la necesidad de implementar múltiples soluciones para cubrir múltiples aplicaciones, lo que hace que proteger tu software sea un proceso mucho más sencillo.

Compatibilidad:

la incorporación de distintas aplicaciones requerirá integración, mientras que una DXP tradicional está preparada para comenzar a usarla. Puedes confiar en que todos los componentes ya serán compatibles y podrán comunicarse entre sí sin problemas.

Sitecore ofrece una amplia gama de soluciones, desde SaaS composables hasta DXP completas. Sabemos que no existe un enfoque único para todo y podemos ayudarte a descubrir la mejor opción para tu empresa, garantizando un futuro más brillante tanto para ti como para tus clientes.